LLEGAN LA NAVIDAD Y LOS REGALOS

¿Para qué tantas guerras y tantos siglos de perfeccionamiento del comercio, de progresos científicos, de mejoras de la producción y de las condiciones de vida (aunque sólo sea para una parte de la población mundial) para volver de nuevo a situaciones ya vividas anteriormente por nuestros antepasados: guerras fraticidas en Oriente Medio y batallas económicas en Europa? Se acabó la gratuidad de los servicios, las subvenciones, los regalos de bancos y empresas, como dirían los moros -con perdón- lo “barato, barato”.

Ha llegado el tiempo de los recortes para el ciudadano, desde una Administración (Estado, Autonomías, Ayuntamientos) totalmente endeudada: la sanidad, la educación, los transportes, todos estos servicios que nos han acostumbrado a disfrutar por un módico precio, tenemos ahora que acostumbrarnos a ir pagando una parte contante y sonante, además de lo recaudado en impuestos. Sí, tenemos que aprender a prescindir de rebajas, a apretarnos el cinturón para pagar no sólo la deuda pública de los gobiernos centrales, autonómicos y municipales al ritmo y al nivel que marcan los mercados, sino también la deuda privada, porque la Banca aprieta las tuercas a los morosos, a los insolventes. Se acabó el tiempo de los regalos y de las rebajas: si no pagas te quito el coche, el piso y lo que haga falta.

Nos acecha de nuevo no sólo la era de la austeridad sino también el auge de la xenofobia.

Zapatero nos ha agraciado con una plan de austeridad de derecha : modificación del Derecho del trabajo para facilitar los despidos, fin de la prima por nacimiento, bajada del salario de los funcionarios, congelación de las pensiones de jubilación, de las ayudas al desarrollo, reducción de las inversiones públicas, de las indemnizaciones y ayudas a los parados …. Es decir se ha desarrollado una política de derechas para un futuro de izquierdas, pero si esta izquierda ha ayudado a nuestro endeudamiento con una política de derechas ¿cómo puede ser que, en tiempo de crisis, hayamos confiado a la derecha nuestra esperanza de futuro? ¿Será que un gobierno de derecha va a hacer una política de izquierdas?

Nos espera un periodo de recortes, de austeridad y de humildad. Nos habían hecho creer (y no los creímos) que estábamos en esta España nuestra -y en Europa-. Lo malo de todo esto es que sólo se piensa y se buscan soluciones para el problema financiero -etéreo- y nada para el sector productivo -real- ni para los ciudadanos.