En Méjico D.F. hay una cantina en la que un día, hace ochenta y dos años, entró Pancho Villa a caballo, pidió un tequila y pegó un tiro al aire que se conserva en el techo, agujero negro cerca de una de las ventanas. Al Centauro del Norte se lo chingaron más tarde a balazos, en Canutillos, Durango. Pero el tiro sigue allí, en el techo de la cantina, en el centro de un pequeño círculo que nadie se ha atrevido a cubrir de pintura. Y cada vez que voy a Méjico, a presentar un libro o a lo que sea, me escapo a la calle 5 de Mayo, a tomarme un tequila Herradura Reposado en la mesa que hay justo debajo del tiro de Francisco Villa.
Acabo de leer la Patente Desayuno en Sanborn’s que acaban de
publicar en el twitter de Arturo Pérez Reverte y, aunque escrita en 1996,
reconozco que sigue siendo de primorosa actualidad. Además es de las que me
gustan, es un buen brindis a todos los que luchan para mejorar el mundo en el
que vivimos.
Sanborn’s es una referencia a una cantina en la que se supone fueron fotografiados los mismísimos Pancho Villa y Emiliano Zapata, unos revolucionarios mejicanos que quisieron restaurar el orden constitucional y acabar con la pobreza que existía en el país allá a principios del siglo XX.
Los hechos históricos serían grosso modo los siguientes:
Desde principios de siglo XX se produjo un cambio en la conciencia política de Méjico. La revolución mejicana fue la primera revolución social del siglo XX y duró de 1910 a 1920. Empezó como una rebelión en contra de la dictadura de Porfirio Diaz y de Francisco Madero. Posteriormente, la rebelión derivó en una revolución con Emiliano Zapata en el sur y Pancho Vila en el norte luchando por causas sociales como la reforma agraria, la justicia social y la educación. En 1917, el establecimiento de la Constitución política de los Estados Unidos mejicanos representaría la culminación de la revolución armada. Se trataba de una constitución liberal y social (reforma agraria y legislación laboral y progresista).
APR demuestra muy a menudo un cierto escepticismo en la lucha del ser humano por la libertad y por la abolición de la explotación ejercida por unos dictadores que sólo anhelan la obediencia y sumisión del resto de la población. Sin embargo, esta vez, parece querer demostrar que las revoluciones son posibles o por lo menos hay que dejar que la gente crea en ellas y APR se atreve incluso a echar un capote a Zapata y a sus seguidores, esta frase lo dice todo : Y, aunque tampoco entonces eso cambie nada, alguien le hará una foto que vuelva a ser lo único que de verdad queda: la certeza de que siempre son posibles el coraje, la insumisión y la esperanza]. Y comprendí que, aunque a Emiliano Zapata lo hayan matado siete mil veces en todas partes, nadie tiene derecho a publicar el secreto.
Yo también creo en el ser humano y en su lucha por un mundo mejor pero a diferencia de APR, no sólo antes sino ahora también. Sólo tenemos que leer los periódicos y ver la televisión para contemplar a los ciudadanos de todos esos países árabes (Libia, Egipto, Túnez, Siria, Yemen), todos estos héroes que al igual que Zapata se han sublevados y se han erigido contra las dictaduras y por la libertad, lo que se ha llamado la Primavera árabe. Las revoluciones, aunque pacíficas, siempre serán necesarias para defender los valores democráticos y los derechos sociales y humanos, son un paso adelante en la conquista de un mundo en el que se respecte al ser humano y su libertad.
Debo, sin embargo, reconocer que Arturo Pérez Reverte parecía en 1996 mucho más optimista que hoy en día, a lo mejor tenía entonces más fe en el ser humano que lo que parece demostrar en la actualidad. Todo sea por todos los héroes de este mundo y por el secreto de Emiliano Zapata.
Sanborn’s es una referencia a una cantina en la que se supone fueron fotografiados los mismísimos Pancho Villa y Emiliano Zapata, unos revolucionarios mejicanos que quisieron restaurar el orden constitucional y acabar con la pobreza que existía en el país allá a principios del siglo XX.
Los hechos históricos serían grosso modo los siguientes:
Desde principios de siglo XX se produjo un cambio en la conciencia política de Méjico. La revolución mejicana fue la primera revolución social del siglo XX y duró de 1910 a 1920. Empezó como una rebelión en contra de la dictadura de Porfirio Diaz y de Francisco Madero. Posteriormente, la rebelión derivó en una revolución con Emiliano Zapata en el sur y Pancho Vila en el norte luchando por causas sociales como la reforma agraria, la justicia social y la educación. En 1917, el establecimiento de la Constitución política de los Estados Unidos mejicanos representaría la culminación de la revolución armada. Se trataba de una constitución liberal y social (reforma agraria y legislación laboral y progresista).
APR demuestra muy a menudo un cierto escepticismo en la lucha del ser humano por la libertad y por la abolición de la explotación ejercida por unos dictadores que sólo anhelan la obediencia y sumisión del resto de la población. Sin embargo, esta vez, parece querer demostrar que las revoluciones son posibles o por lo menos hay que dejar que la gente crea en ellas y APR se atreve incluso a echar un capote a Zapata y a sus seguidores, esta frase lo dice todo : Y, aunque tampoco entonces eso cambie nada, alguien le hará una foto que vuelva a ser lo único que de verdad queda: la certeza de que siempre son posibles el coraje, la insumisión y la esperanza]. Y comprendí que, aunque a Emiliano Zapata lo hayan matado siete mil veces en todas partes, nadie tiene derecho a publicar el secreto.
Yo también creo en el ser humano y en su lucha por un mundo mejor pero a diferencia de APR, no sólo antes sino ahora también. Sólo tenemos que leer los periódicos y ver la televisión para contemplar a los ciudadanos de todos esos países árabes (Libia, Egipto, Túnez, Siria, Yemen), todos estos héroes que al igual que Zapata se han sublevados y se han erigido contra las dictaduras y por la libertad, lo que se ha llamado la Primavera árabe. Las revoluciones, aunque pacíficas, siempre serán necesarias para defender los valores democráticos y los derechos sociales y humanos, son un paso adelante en la conquista de un mundo en el que se respecte al ser humano y su libertad.
Debo, sin embargo, reconocer que Arturo Pérez Reverte parecía en 1996 mucho más optimista que hoy en día, a lo mejor tenía entonces más fe en el ser humano que lo que parece demostrar en la actualidad. Todo sea por todos los héroes de este mundo y por el secreto de Emiliano Zapata.
Me temo que la Patente que nos ocupa va a seguir siendo muy
actual, no diremos que los estudiantes españoles sean unos héroes, pero sí que
tienen todos un buen par de "cojones" para defender sus intereses
estudiantiles y defenderse unos a otros a pesar de la violencia de la carga
policial. Nos quejabamos de nuestros jóvenes, pero ahí están cuando ellos consideran
que es necesario.
Aunque lamento que la situación en Valencia (y en Madrid) haya llegado a estos extremos, brindo por estos jóvenes y estos padres que estos días se han unido en defensa de sus derechos y libertades.
Aunque lamento que la situación en Valencia (y en Madrid) haya llegado a estos extremos, brindo por estos jóvenes y estos padres que estos días se han unido en defensa de sus derechos y libertades.
Y que pena me da que piensen que la defensa de sus derechos
se tengan que resolver siempre a palos. Bastante tienen con el futuro tan
incierto que les espera, ese futuro que van a heredar de nosotros, los mayores,
de los que se supone que son adultos y por lo tanto maduros, qué mal lo hemos
hecho entre todos. Tanto sufrimiento que han padecido, tantos esfuerzos y
tantas horas de desvelo y de trabajo que han desplegado tantos trabajadores de
este país para que sus hijos pudieran disfrutar de un mundo mejor desde el
punto de vista cultural, laboral y económico ; sí, queríamos emular a nuestros
abuelos, a nuestros padres, es decir ofrecer a nuestros hijos lo mejor, todo
eso para qué, para que ahora tengan que luchar con las manos limpias en defensa
de su futuro y de sus derechos.
Bastantes palos hemos recibido, los padres y abuelos, para
que ahora nuestros hijos y nietos tengan que coger, de nuevo, el testigo que
pensábamos encerrado a buen recaudo y para siempre en la caja fuerte.
Y me da pena que tengan que aprender de esta vil manera lo que es una carga policial y que piensen que la defensa de los derechos sociales se resuelven a palos.
Y me da pena que tengan que aprender de esta vil manera lo que es una carga policial y que piensen que la defensa de los derechos sociales se resuelven a palos.
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